jueves, 5 de mayo de 2011

Hablando de... Pozos de Ambición

Jesús Ángel Rodríguez nos habla de "There will be blood" o lo que es lo mismo:
 
Pozos de ambición

Les juro que les iba a hablar de “Miel” la última película de la trilogía de Kaplanoğlu (lo reconozco: el apellido se las trae)… pero entonces, durante un rodaje, alguien me habló de “Pozos de ambición”, de P.T. Anderson alias “el tío que hizo Magnolia”.
 
Varios freakies (como yo) aparecieron como de la nada y entraron en resonancias alabanceras sobre el mejor y santo patrón de los films malditos de toda la historia del cinematógrafo. Que si los primeros 20 minutos son maravillosamente “Kubrickianos”, que si Daniel Day Lewis está maravilloso, que si la foto es sobria a la par que exuberantemente hipnótica. En fin, que me decidí a verla cuanto antes. Era una peli del “tío que hizo Magnolia” así que era obvio que debía rellenar esa laguna en mis ya de por sí muy mermadas entendederas. Así que la vi.
 
En efecto, todo lo que me fue revelado era cierto…. Lo malo es lo que los muy puñeteros se callaron lo más divertido: el guión no es sólo imperfecto sino que posee unas elipso-lagunas narrativas incomprensibles. Además “Daniel” es predecible desde el primer diálogo.
 
¿Se pueden producir elipsis en un guión? Sí si son temporales y evitan al público momentos que carecen de interés. Pero lo que aparece en “Pozos de ambición” a mí me suena a chiste (o a recorte de presupuesto para metros de película, no sé). ¿Por qué pasamos de un niño pequeño a una joven abandonando a su padre, así, a lo burril? Es inexplicable, incluso para “el que hizo Magnolia”… más en su caso.
 
Y lo de Daniel es descarado. Verán: su personaje es malo, malo, malo. Y de tan malo, se queda solico en el mundo. Punto.


 “Pozos de ambición” me sirve para recordarle a más de uno que incluso e Magnolia, P.T. Anderson tiene una lado oscuro, un lado “new age curil” solapado: ¿o es que nadie recuerda la cancioncita de marras? ¿o la lluvia de sapos? ¿o el para mí en exceso exageradísimo perfil de la enamorada mujer del anciano padre de Tommy Cruise? Lo que yo creo es que “Pozos de ambición” es una “lluvia de sapos” sin los momentos de clarísimo talento que existen en “Magnolia”, que son muchísimos.
 
En cuanto al “pastor de la tercera iglesia”… ¿Es un marciano? No. Es un personaje contradictorio en el peor sentido de la palabra ya que en cada aparición hace algo diferente a lo que se espera de él dada su primera definición: sus reacciones son impredecibles de nuevo en el peor sentido de la palabra. El hermano-amigo de Daniel, podría haber sido mucho más interesante, pero desaparece muy rápido: lo que de
nuevo nos temíamos desde la primera aparición. Y cuando encima Daniel le explica que “él es así porque odia a todo el mundo” llega la repanocha: si había algún misterio, alguna razón para ver la peli va el personaje y nos la cuenta él mismo, como si después de una hora de maldades no nos hubiéramos dado cuenta de ello. En cuanto al hijo de Daniel es también un buen personaje-promesa, pero de nuevo desaparece para… ¡mostrarnos que Daniel es malo y egoísta! lo cual ya sabíamos desde el minuto 25. Los personajes vienen y van pero no sabemos en realidad grandes cosas de ellos salvo que, sí, Daniel Day Lewis sufre mogollón…pero mogollón mogollón… porque es muy malo… y egoísta… y los egoístas se autodestruyen a sí mismos y se acaban liando a mamporros “bolos-ianos” con Dioses y curillas. Todo el filme nos lo recuerda de un modo directo, sin descanso… y sin ritmo.
 
¿Saben? Creo que Anderson nos quiso contar “Ciudadano Kane” mezclado con “2001” y le salió el híbrido “Pozos de ambición”… una obra maldita, de culto… en fin ya saben. Y es que Welles y Herman Mankievich están sólo al alcance de Welles y Herman Mankievich.
 
¿Les cuento un secreto? Aunque P.T. Anderson alias “el tío que hizo Magnolia” haya dirigido y escrito Magnolia y aunque a mí me gustó mucho Magnolia… ésta es un auténtico “no sé que”. Y si en vez de el director de “Magnolia” la hubiera dirigido el que les habla, nadie habría dicho que es de culto, sino “otro rollo de peli lenta y pretenciosa con una estructura inacabada y un final de semi-risas”.
 
Lo de siempre: sería una peli remarcable para otro… pero cuando se crean expectativas sobre el talento de uno, hay que dar más… no menos.
 
Ah! Sí. La foto, algunas composiciones, la interpretación Lewis (cuando le obliga a beber el agua a su hijo, por ejemplo) y el comienzo “Kubrick” son guays, eso es verdad. ¿Qué no están de acuerdo? Mejor: siempre me alegran las opiniones diversas. El mundo sería muy aburrido sin ellas. ¿No?
 
Lo prometo: la próxima semana intentaré hablarles de “Miel”
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